QUERIDA FAMILIA PARROQUIAL

Nos encontramos inmersos en el más importante de todos los tiempos litúrgicos, la Pascua, centro de nuestra fe cristiana, en el que celebramos la muerte y resurrección de Jesús.

Es un periodo que comprende los cincuenta días que van desde el Domingo de Pascua hasta el domingo de Pentecostés, donde se cumple la Pascua.

La Pascua debe tener en nosotros una repercusión para nuestra vida cristiana. Celebramos que la vida ha vencido a la muerte, que todo renace, que florece una nueva vida que Jesús nos da.

Pero a veces esto no es fácil, nuestra vida sigue igual, el trabajo, las obligaciones, las prisas vuelven a nuestro que hacer ordinario, y nos dificultan ver esa repercusión en nuestra vida cristina.

Pero en eso consiste la Resurrección de Jesús, en iluminar lo ordinario desde el interior, es la reconciliación de la Gloria con lo cotidiano. El Resucitado no es uno de esos superhombres, su Gloria roza el día a día, ya que apenas ha llegado a la cima de la perfección, no encuentra nada mejor que hacer, que encontrarse con sus amigos para conversar y comer con ellos.

Este es el hilo conductor de este pequeño libro, a través de las lecturas del Evangelio de estos estos días de Pascua, nos enseña que las apariciones del Resucitado tienen un carácter eminentemente práctico, nos reconducen al amor al prójimo y nos enseñan a ver las cosas con los ojos del Espíritu.

La misma Sagrada Familia en su cotidianidad, a pesar de estar denostada en nuestros tiempos, nos enseña que la paternidad y la maternidad son la culminación y novedad eternas, y que todo lo que nos ocurre, todo lo bello y lo conseguido, incluso cuando es fruto de nuestro trabajo, TODO tiene carácter de don inmerecido, de encuentro y de gracia de Dios.

Nuestro autor, Fabrice Hadjadj crece en una cultura más bien atea, anticristiana y anticlerical. Se sumerge en la escritura, la literatura, la filosofía y el teatro. El encuentro con Jean Louis Chrétien, le permite ver que el cristianismo es el misterio de la Encarnación y que nada tiene que ver con el espiritualismo o la gnosis. Estando su padre enfermo, reza a la Virgen y recibe la gracia de la conversión: «Todos los hombres están atraídos por Cristo, todos. Y no lo saben. Tengo esa confianza porque, aun siendo ateo, he vivido en primera persona esa atracción».

Con un estilo fresco, actual y que no deja indiferente a ninguno de sus lectores este autor nos sumerge en el don del milagro, dentro de nuestro ajetreo habitual.

Os invitamos a leer este libro tan necesario en nuestro tiempo, un libro que nos hace pararnos y ver las maravillas Dios en todo lo que nos rodea, “así como un bebé en el vientre de su madre, sabe que ella envuelve su mundo aunque no la vea, nosotros aunque a veces nos cueste, sabemos que todo nuestro mundo y lo que hay en el y nos sucede, es un homenaje a la extrema bondad del Eterno”.

VIVAMOS ESTA PASCUA EN CLAVE DE MILAGRO, NO VIVIR LAS COSAS EXTRAORDINARIAS, SI NO VIVIR EXTRAORDINARIAMENTE LO ORDINARIO.

FELIZ PASCUA DE RESURRECION FAMILIA