Medjugorje.

(JESÚS GARCíA)

En el año 2006, cuando en España aún era muy desconocido Medjugorje, el Grupo Intereconomía envío a dos jóvenes periodistas a hacer un reportaje, a ver qué pasaba allí. Gonzalo Moreno y Jesús García fueron los enviados, y en apenas una semana de viaje, sus vidas dieron un giro absoluto. Gonzalo, con 30 años, dejó el trabajo y entró al seminario para ser ordenado sacerdote. Jesús, con 28, comenzó a viajar a Medjugorje en respuesta a una llamada, una vocación, un mandato que le dio firmemente el padre Jozo, quien fuera párroco de Medjugorje en 1981, un personaje principal de los acontecimientos de Medjugorje.

Jesús García ha lanzado una edición conmemorativa del libro Medjugorje publicado en 2009, y que ha vendido más de 20.000 ejemplares.

En 2017, el Papa Francisco envío a Monseñor Henryk Hoser como Visitador Apostólico Pastoral. Esto es una especie de consultor o interventor que toma el gobierno de la parroquia de Megjugorje y controla la pastoral de la parroquia. Este enviado apostólico del Papa sigue allí desarrollando la pastoral, en total comunión con los franciscanos de la provincia y con la diócesis.

Otra de las novedades ha sido que Monseñor Hoser ha permitido las peregrinaciones oficiales a Medjugorje. Las privadas nunca estuvieron ni prohibidas ni limitadas. Pero esta nueva postura permite que las peregrinaciones sean organizadas por una parroquia, por una diócesis, por un movimiento, por una congregación… que es una especie de reconocimiento que la parroquia es un santuario.

Pero lo más importante de todo, en nuestra opinión, es que Roma acabó en 2014 sus estudios sobre los primeros siete días de apariciones. Es lo que en su momento se llamó “La Comisión Ruini”, un grupo de investigadores organizado por el Papa Benedicto XVI.

De este trabajo lo que ha trascendido es muy importante. La mayor de todas las aportaciones es que parece ser que se recomienda al Papa dar por ciertas las apariciones de los siete primeros días, y seguir investigando las restantes.

Ambos libros, fascinantes, nos ponen de manifiesto el amor de nuestra Madre del cielo, que no deja de la mano a sus hijos en este mundo secularizado y globalizado, y nos pueden ser útiles para conocer de primera mano la historia de la peregrinación que este año propone nuestra Parroquia.

Os deseamos un feliz verano y un merecido descanso.

Unidos en oración, volveremos en septiembre si Dios quiere con nuevos libros y mucha ilusión.